El presupuesto general del Ayuntamiento de Totana para el año 2012 se va a reducir en cuatro millones de euros al pasar de los 25 millones de euros del anterior ejercicio a los 21 previstos para el próximo año, lo que supone un descenso del 16,7%; y está basado en la austeridad y el rigor en las cuentas públicas adaptándolo exclusivamente a los ingresos reales de tesorería.
La alcaldesa, Isabel María Sánchez, y la concejal de Hacienda y Economía, María José Baeza, presentaron hoy las características del nuevo presupuesto para 2012, que se aprobará en el pleno ordinario correspondiente a noviembre y que entrará en vigor el 1 de enero de 2012; e insistieron en que el documento se ha confeccionado con la premisa de adaptarlo a la tesorería real.
La edil del ramo calificó este presupuesto como "el mejor posible en una época de crisis como ésta que sufrimos, con un mayor refuerzo y un acento en los asuntos que son importantes" e insistió que "se ha aplicado la máxima de que no se gaste más de lo se ingrese en las arcas municipales".
Reiteró que éste se ha adaptado a los ingresos de tesorería, de manera que no se incluyen ingresos por ventas de patrimonio ni posibles ingresos por convenios urbanísticos porque, según dijo, "en el caso de que existan, que es improbable, sería un remanente para hacer frente al pago a proveedores".
Además, subrayó que los principios que sustentan la elaboración de este presupuesto para el 2012 son la transparencia, la austeridad en el gasto público, respeto a la estabilidad presupuestaria, una especial atención al gasto social y apoyo a los sectores productivos.
Al respecto, dijo que el Ayuntamiento continúa haciendo un gran esfuerzo en mantener las ayudas a las personas más necesitadas y apoyando a los sectores que, con la colaboración de la administración, tienen que generar un crecimiento económico con la creación de empleo, por lo que añadió que es "un presupuesto que estimule a la participación privada".
La concejal precisó que la actividad de los servicios municipales se ha reformado y adaptado a las necesidades y a la situación económica actual con el objetivo de ser más eficientes y ajustar el gasto al cumplimiento de los objetivos de estabilidad, confianza, coherencia y previsibilidad.
Recordó que en el presupuesto de 2011 se estableció una previsión de ingresos que no se ha podido cumplir debido a la recaída de la actividad económica y el rebrote de la crisis económica.
Baeza explicó que se ha reducido el gasto de personal (capítulo 1) en 1,2 millones de euros por la optimización de recursos llevada a cabo y consecuencia de la reducción de salarios a cargos públicos y personal de confianza d-casi medio millón de euros- y la incorporación de los costes de los servicios de jardinería, cuyos trabajadores han sido rescatados a la plantilla municipal.
También se ha reducido el gasto de gastos corrientes en bienes y servicios (capítulo 2) en 1,4 millones de euros, consecuencia de la política de contención del gasto, con una revisión de todos los contratos, dado que es un presupuesto adaptado a los ingresos, reiteró.
La edil comentó que las inversiones para obras descienden un 74% al pasar de 2,5 millones de euros en 2011 a 661.288 en el próximo ejercicio presupuestario.
En cuanto a las operaciones de capital, éstas se han reducido casi un 60% pues, según comentó, sólo se van a acometer nuevas inversiones en el caso de que vengan subvencionadas; por lo que se mantendrá la inversión en la finalización de las obras que no estén terminadas.
Estabilidad presupuestaria máxima
Por su parte, la alcaldesa explicó que el presupuesto está construido sobre el documento presentado en septiembre de "Cien medidas, cien acciones" que es la hoja de ruta de la acción de gobierno y de ajuste para los próximos meses, así como las primeras conclusiones que va arrojando la auditoría de servicios.
La alcaldesa anunció que en el 2012 no se subirán los impuestos e informó de que en el futuro, en el caso de que haya que adoptar más medidas de ahorro para conseguir la estabilidad presupuestaria, se tomarían aquellas que no afecten al bolsillo del ciudadano y serían, en todo caso, de régimen interno.
Repasó algunas de las medidas de ajuste ya adoptadas, como la externalización de servicios, la reducción de liberados y la rebaja salarial a políticos y personal de confianza, la eliminación de dietas, protocolo y otras partidas similares, revisión de contratos y el descenso en gastos de telefonía, seguros, locomoción y parque móvil, entre otros.
Asimismo, explicó que las medidas de ajuste adoptadas desde principios de legislatura son impopulares pero necesarias e insistió en que vamos a continuar dedicando una especial atención a las políticas sociales y un apoyo a los sectores encargados de generar empleo.